lunes, 13 de junio de 2016

Recursos para la comprensión de la lectura







Estrategias de lectura

      Las estrategias son métodos empleados por los lectores para hacer uso de la información proporcionada por el texto. Las estrategias se aprenden y se ponen en práctica para mejorar la capacidad de comprensión del lector ante cualquier material impreso y al enseñarlas se persigue desarrollar el pensamiento y el razonamiento consciente acerca de los problemas encontrados en el texto, donde cada situación demanda respuestas diferentes (Duffy y Roehler, 1987). Resulta pertinente destacar, entonces, que la comprensión de un texto hace intervenir no una, sino diversas estrategias combinadas. Esto no es incompatible con el trabajo específico dirigido a una u otra estrategia, lo que no debe perderse de vista es que "éstas son un medio para la comprensión, y no una finalidad en sí mismas" (Solé, 2001, p. 27).

     Son diversas las estrategias utilizadas por el lector para obtener, evaluar y emplear la información, sin embargo, resulta posible inducir su uso para incrementarlas, perfeccionarlas y adaptarlas al propósito de la lectura, al tipo de texto y a la complejidad de éste. En el caso específico de la inferencia, si en un texto la información no aparece explícita, el lector habrá de recurrir a estrategias inferenciales para conectar la información implícita con la explícita sobre la base de su conocimiento previo (Borzone y Marro, 1990).
     Entre las estrategias de elaboración cuyo objetivo es integrar la información presentada con el conocimiento previo, se halla la de hacer inferencias; estas estrategias permiten la formación de un vínculo entre el material nuevo y el ya aprendido (Poggioli, 1989) y son realizadas por el lector "con la intención de crear nuevos elementos que se relacionen con el contenido del texto para hacerlo más significativo" (Morles, 1991. p. 264).

Estrategias de pre-lectura

     Tienen como objetivo conectar los conocimientos previos con los nuevos conceptos, de este modo los hechos nuevos se integran en el campo de los conocimientos ya existentes. Se trata de formar esquemas, es decir, "un conjunto organizado de conocimientos sobre un elemento del mundo en particular" (Bartlett, cit. por Renkema, 1999). Dichos esquemas intervienen favorablemente en la elaboración de inferencias en virtud de que brindan un marco a la interpretación y la orientan, lo que facilita la comprensión del discurso (Renkema, 1999).

     Los esquemas pueden estar referidos al contenido o a la organización estructural de los textos, ambos contribuyen a que la lectura sea más relacional que lineal. El enriquecimiento de los esquemas previos del lector propicia "un verdadero proceso interactivo significativo entre el lector y el texto" (Martínez, 1999. p. 41).

Algunas estrategias previas a la lectura serían las siguientes:

  1. 1.- Indicar el objetivo o propósito de la lectura: lo primero que el estudiante (y, por supuesto, el docente) ha de tener claro antes de leer un texto es el objetivo o propósito de la lectura, desconocerlo afectaría la información extraída del texto (Johnston, 1983). 
  2.    Una vez asignado el texto que habrá de ser leído para el propósito previamente establecido, se recomienda llevar a cabo estrategias de contenido, que consisten en diagnosticar qué y cuánto sabe el alumno sobre el tema, para determinar su conocimiento y experiencias acerca de éste. Esta actividad puede efectuarse de diversas maneras, entre ellas, discusiones, intercambio de ideas sobre el tema o mediante la técnica de la pregunta. Las estrategias de contenido persiguen activar el conocimiento previo (Dole, Valencia, Ann y Wardrop, 1991). Luego del empleo de estas estrategias, los resultados permiten detectar si existe conocimiento o experiencia previa asociada o asociable al tema, si sólo son pseudoconceptos o conceptos espontáneos (producto de aprendizajes de la vida diaria donde no ha mediado la instrucción sistemática (Vygotsky, 1973), o si no se posee concepto alguno.
  3.    .- Otras estrategias recomendadas para ser puestas en práctica antes de la lectura de un texto son las de estructura (Johnston, 1983). Se necesita constatar el conocimiento del lector sobre la estructura textual; es conveniente trabajar con la estructura organizativa del texto y familiarizar al estudiante con los diversos patrones estructurales que puede tener un texto de orden expositivo (descripción, colección, causa, problema-solución, comparación/contraste). Este tipo de actividades incrementa la comprensión.
  1.  El reconocimiento de diferentes estructuras textuales puede ejercitarse empleando organizadores gráficos (esquemas, diagramas de flujo) en microcomputadoras (Sinatra, 1991) o, en su defecto, en la pizarra.
Estrategias durante la lectura
     Las estrategias que se aplican durante la lectura han de estar en función de las exigencias del texto y de las actividades relacionadas con éste. Permiten extraer el significado global de lo leído, para lo cual se requiere "saber reconducir la lectura", avanzando o retrocediendo según sea necesario. Al final, los nuevos conceptos se incorporarán a los conocimientos previos que se han mencionado en las estrategias de prelectura.
Al iniciar la lectura, puede procederse de dos modos: dejando que los estudiantes la terminen para luego ejecutar las demás estrategias o interrumpiéndola con preguntas que respeten la organización del texto (Slater, 1985). Interrumpir, podría servir para modificar las inferencias o confirmarlas antes de finalizar la lectura. En todo caso, la relación con el texto ha de ser activa. A medida que lee, el alumno predice cómo avanzará el texto, lo que puede ser confirmado o no. Si es necesario, se modifican las anticipaciones y se plantean otras (Serra y Oller, 2001).

     Al final, se evalúa el texto leído, se integra la nueva información y se incorpora a su conocimiento previo. Los esquemas iniciales del lector pueden ser reformados en función del conocimiento obtenido del texto leído (Serra y Oller, 2001).

Estrategias de postlectura

Finalizada la lectura del texto se proponen diversas estrategias:

1. Estrategias de preguntas:
    1.1. Formulación de preguntas literales primero y luego inferenciales. De este modo se integraría la información explícita con la implícita en un todo coherente.

    1.2. Formulación de preguntas únicamente sobre los "elementos perdidos" del texto.

    Ventajas de la estrategia de preguntas: las preguntas facilitan tres veces el número de inferencias que se hacen por la vía del recuerdo libre (Carr, 1983); amplían y guían la comprensión; promueven el pensamiento crítico; ayudan a centrarse en conceptos e ideas principales (Nuevas perspectivas en la enseñanza de la lectura, 1990). El requisito exigido al emplear este tipo de estrategia es saber qué tipo de inferencia se pretende evaluar con cada pregunta.

    2. Estrategias de elaboración: son las que permiten generar inferencias y conclusiones, pensar en implicaciones teóricas o prácticas de la información, evocar ideas y relacionarlas con las del texto (Morles, 1991). Entre ellas tenemos las siguientes:
    2.1. Relacionar título y contenido: esta estrategia puede llevarse a cabo también antes de la lectura, realizando hipótesis sobre el contenido del texto (inferencia a priori), o después de la lectura, analizando –por ejemplo- las limitaciones del título (inferencia a posteriori), las expectativas que crea, el nivel de información que transmite, su relación con la idea principal del texto..
    2.2. Deducir ideas principales, tema del texto, intencionalidad del autor (inferencias lógicas).
    2.3. Generar nuevas proposiciones producto de la integración de lo leído con el conocimiento previo: proyecciones a futuro, implicaciones de lo expuesto en el material leído, aplicación de las ideas o planteamientos del texto, vigencia del tema, entre otros. (inferencias pragmáticas).
    2.4. Esbozar conclusiones que no estén en el texto (inferencias lógicas, pragmáticas).

Ventajas de las estrategias de elaboración: son de suma importancia, especialmente para un estudiante universitario, porque inducen a hacer más significativa la información leída y transfieren el conocimiento de la memoria a largo plazo a la memoria de trabajo; también integran la información nueva con el conocimiento almacenado (Poggioli, 1989).

Disponible en:
http://www.scielo.org.ve/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1316-00872002000200009

Técnicas básicas para la lectura




                                                     
                                                                   




1- Establecer el propósito de la lectura: antes de comenzar a leer es importante establecer con claridad ¿por  qué?   o para que se va a efectuar la lectura. Existen ocasiones que se lee para obtener ideas generales, distinguir ideas principales de un texto, realizar una evaluación critica, comprenderlo, distraerse, hojearlo entre otros.

2- Inspeccionar y examinar el contenido el libro: esto quiere decir que se debe dar un vistazo rápido a los textos, ya que por lo general se leen solo los títulos y subtitulo. Esto ayudara a reconocer lo que quiere transmitir el libro, y  ayuda a lograr una visión global, tener una idea amplia del libro, conocer el contenido de lo que se estudiara y así lograr concentrar la atención.

3- Cuestiónese y pregúntese: es recomendable convertir los títulos y subtitulo en preguntas.

4- Buscar el significado de lo que se esta leyendo: leer cuidadosamente y buscar las ideas principales, para comprender y entender lo que se esta leyendo.

5- Exprese lo que va leyendo: se refiere a que se debe hablar consigo mismo, respecto a lo que se esta leyendo, cuestionar y profundizar, lo cual ayuda a que el lector reconozca si lo leído fue comprendido o solo estuvo perdiendo el tiempo.


6- Repasar lo estudiado: se debe repasar a intervalos, es decir que  cuando se termine de leer un párrafo, es conveniente recordar lo que dijo el párrafo: esta técnica ayuda a aprehender, comprender y no olvidar lo repasado.



Biblíografia consultada:

http://es.slideshare.net/keyarias54/técnicas-delecturayredacciondetextos




Procesamiento interactivo y lectura de textos






Procesamiento Interactivo de textos





       Para comprender un texto se requiere que el lector realice actividades complejas de micro y macro procesamiento. Los microprocesos son de ejecución relativamente automática y tienen que ver con todos los subprocesos involucrados que se dirigen al establecimiento, codificación y coherencia local entre proposiciones. Cualquier lector con experiencia es capaz de realizar estos microprocesos de forma automática y solo se percata de estos cuando enfrenta
a  situaciones que obstaculizan el curso de la lectura.

       Las actividades de macroprocesamiento o macroprocesos,  son aquellas que tienen que ver directamente con la construcción de la macroestructura (representación proposicional y semántica de naturaleza abstracta  y global del texto) y del modelo de la situación derivada del texto.

      Dentro de los microprocesos involucrados en los niveles inferiores de comprensión tenemos los siguientes:

ü  El reconocimiento de las palabras escritas en los enunciados.
ü  La vinculación de las proposiciones (letras) entre sí, inferencias necesarias para la integración y vinculación respectiva.
ü  La identificación de proposiciones.
ü  Análisis y codificación de reglas gramaticales y sintácticas respectivas.


       La elaboración o construcción  de una micro estructura por el lector equivale
A reconocer que y decir que el texto es legible.

     De igual manera cabe destacar que los macroprocesos inmersos en los niveles superiores, los  más relevantes son:
ü  Integración de proposiciones (establecimiento de la coherencia local)
ü  Integración y construcción coherente del significado global del texto (macroproposiciones: macroestructuras)  
ü  Construcción de un modelo mental o de la situación.

     El procesamiento interactivo implica que hay una dependencia y ocurrencia  simultánea de los procesos de orden inferior y superior.

Elosúa y García (1993) han distinguido varios niveles de procesamiento de la lectura desde un punto de vistas funcional. Estos niveles componen un proceso continuo que se inicia en los niveles de lectura  asociados al microprocesamiento ,continúa en los niveles de comprensión más profunda ,donde intervienen  los macroprocesos ,y termina en niveles superiores de metacomprensión donde los procesos de comprensión llegan a ser comprendidos y autorregulados .

1.-Nivel de decodificación.  Este nivel  tiene que ver con los dos primeros tipos de microprocesos: los referidos al reconocimiento de palabras ya a la asignación del significado léxico.

2.-Nivel de comprensión literal.  El cual corresponde con lo que se ha llamado”compresión de lo explícito del texto”. Este nivel de comprensión refleja simplemente aspectos reproductivos de la información expresada en el texto sin ir más allá del mismo.

3.-Nivel de comprensión Inferencial.  Tiene que ver directamente con la aplicación de los macroprocesos y se relaciona con una elaboración semántica profunda(implicados esquemas y estrategias).De este modo ,se consigue una representación global y abstracta que va más allá de lo dicho en la información escrita(inferencias, construcciones, entre otros).

4.-Nivel de metacomprensión. Se refiere al nivel del conocimiento y control necesario para reflexionar y regular la actividad de comprensión.

 BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
Creación Literaria y más: Ayuda y Recursos para Docentes [en línea] Procesamiento interactivo y lectura de textos, Publicado en abril 7 del 2012, [fecha de consulta 01 de junio del 2016], Disponible en : http://creacionliteraria.net/2012/04/procesamiento-interactivo-y-lectura-de-textos/>





domingo, 12 de junio de 2016

Propósito por el que leemos




Propósito de la lectura




En alguna oportunidad nos hemos preguntado ¿Por que las personas leen? Existe una fuerte vinculación entre las razones por lo que se lee y los efectos que la lectura ejerce en las emociones, conocimientos y comportamiento del lector.

Es mejor cuando los amigos discuten temas en los cuales se encuentran interesados, utilizan términos familiares, expresan opiniones o ideas con las que están de acuerdo. Le gusta que describan aventuras de personas como él de tal manera que puedan imaginarlas como si le ocurrieran. Cuando las personas hablan animadamente sobre diversos temas, casi todo el mundo escucha con gran interés y el hablante refleja su placer en su expresión. El hecho de que los escritores hablen con sus lectores de esta forma es la mejor explicación de por qué se lee.

Para informarse: Es muy común que gran cantidad de personas leen para obtener un resultado definido, como es el caso de los  estudiantes,  utilizan los libros para aprender una asignatura, un ama de casa usa un libro de recetas para hacer una torta. Todo depende del objetivo que se quiera lograr es por ello que se realizan publicaciones que brindan información de nuevas artículos que necesita el lector para enriquecer sus conocimientos . Este tipo de lectura es probablemente la más común, porque es la mejor fuente de obtención de ideas y hechos.

Como medio de escape: Habitualmente las personas utilizan este tipo de lectura, porque les permite escapar momentáneamente de estados de ansiedad . Probablemente las personas leen más con este propósito que por cualquier otro. Esta actividad permite que el lector desvié su atención de sus deberes, discusiones, deudas, preocupaciones. Vive por unos momentos en un mundo de maravillas, donde las restricciones son ignoradas, se olvidan los problemas. Este tipo de lectura para refrescar tiene el mismo efecto sobre la sociedad que las obras de arte o la radio. Las personas más preocupadas son aliviadas temporalmente como si tomaran una fresca limonada  en un día caluroso.

Imitando a otros:  En la moderna sociedad todos leen y en ciertas ocasiones muchos lo hacen imitando a los demás, como por ejemplo, en barberías, salones de belleza, consultorios médicos  y otros lugares que  proveen materiales de lectura para mantener ocupados a los que no tienen nada que hacer solo esperar. Los materiales siempre están disponibles y la sociedad espera que se lean tales como afiches, periódicos, revistas entre otros.
Ocupando el tiempo de ocio: La lectura es también sustitución a otros medios de comunicación, muchas personas leen cuando no pueden obtener su propósito de una forma más sencilla, para ellos programas de radio, conversaciones, son más simples y divertidas. Sin embargo, estas personas cuando carecen de otras con quien hablar, algún filme atractivo que observar o un programa satisfactorio en la radio buscan refugio en la lectura. Otros con mayores conocimientos  y habilidades en encontrar que leer, prefieren la lectura a otro medio de comunicación. Pueden encontrar materiales que traten de casi todos los temas en los que están interesados.
Lectura para confirmar creencias: Otro uso de la lectura es el de convencer al lector que está en la posición correcta. Lo que lee sirve para confirmar o afianzar lo que ya conoce o quiere conocer. Cuando lee artículos y libros que lo hacen sentir de esta forma el efecto es el mismo como si multiplicara sus amigos devotos. Ejemplo: el estudiante que es un buen músico pero no atleta se siente mejor cuando lee una historia donde el héroe es músico que gana amigos. Este tipo de lectura es llamada lectura de reforzamiento. La historia del estudiante refuerza o fortalece su creencia, que es mejor ser músico que un buen atleta.
El efecto reforzador de la lectura es interesante porque explica cómo pueden cambiar la actitud del lector. La propaganda que hace cambiar la actitud de las personas consiste en dos elementos: lo hacen pensar en sí mismo, reforzando su creencia de que son inteligentes, respetados y poderosos. Si esto surte efecto lo hace sentir simpatía hacia el escritor y sus opiniones. Otro elemento es hacer creer al lector que el país o individuo tiene los mismos propósitos.
Viaje y aventura imaginaria: Otro uso de la lectura es el de provocar la emoción de una aventura imaginaria. La emoción es mayor o menor en dependencia de cómo el lector puede ocupar el lugar del héroe. Sí este tiene el mismo sexo, edad, intereses del lector no será necesaria mucha imaginación para que el lector sienta que la aventura es real. Las más grandes emociones son encontradas en los libros donde el autor detalla que es lo que hace al personaje y su aventura convincente y lo lleva a lugares donde el lector le gustaría estar.
La lectura tiene un medio y un fin. Como medio sirve para obtener información y específicamente para aprender mediante la lengua escrita, como fin termina en su comprensión e interpretación.